Conocé los hipopresivos y sumá otra opción para cumplir con vos.

Hoy quiero presentarte los ejercicios hipopresivos que, si bien surgieron para entrenar la musculatura del suelo pélvico post-parto, ofrecen múltiples beneficios para cualquiera que no sólo se ven, sino lo más importante, se sienten. Vivimos haciendo malabares para fabricar esos días que parecen tener 48hs. Sin embargo, cuando se trata de nosotras mismas, nos cuesta considerarnos una prioridad y hacernos ese espacio saludable tan necesario.

Por eso, para mi es clave tener opciones. Y esta es una muy buena para esos días en que la energía parece no acompañarnos, no podemos salir o no contamos con demasiado espacio.

ph-@jpmhipopresivos

Te cuento un poco más.
Los conocí cuando mi socia empezó a buscar opciones para rehabilitar su suelo pélvico luego de su segundo parto. Entonces, dimos con Juan Pablo Morcillo (@hipopresivosjpm), coach internacional de hipopresivos, quién nos cuenta en 5 respuestas lo que tenés que saber sobre estos ejercicios:

1-¿Qué son los hipopresivos?
Son ejercicios que combinan técnicas respiratorias y posturales, que pueden realizarse de forma estática o dinámica. Estos ejercicios siguen pautas específicas y, sumados a una aspiración diafragmática (apnea), generan un reequilibrio de las presiones internas del cuerpo.

2-¿Por qué hacerlos?
Porque te aporta muchos beneficios y son indivisibles. En otras palabras, siempre te llevás más de lo que buscabas inicialmente. Entre los principales, podemos mencionar que:
– Alivian los dolores de espalda porque reestablecen tu postura
– Pueden reducir el perímetro de tu cintura entre 4 y 10 cm en los primeros 2 ó 3 meses.
– Fortalecen tu abdomen y suelo pélvico, previniendo o solucionando problemas de incontinencia urinaria, prolapso, hernias o diástasis.
– A nivel respiratorio, potencian la capacidad de tu cuerpo para obtener energía con y sin oxígeno, lo que es positivo para cualquier entrenamiento que practiques y, si padecés epoc o asma, por ejemplo, podés lograr una mejora considerable.
– Incrementan el placer sexual porque aumentan la sensibilidad a través de una mayor irrigación sanguínea en los músculos genitales
– Colaboran con la prevención de lesiones que podría generar algún deporte o malos movimientos.

3-¿Qué necesito para realizarlos?
Ropa cómoda y un lugar donde puedas recostarte con espacio suficiente para estirar brazos y piernas a los costados.
También podés sumar un mat, manta o colchoneta fina, o bien, unas rodilleras y trabajar directamente sobre el piso.

4-Hablemos de tiempos, ¿cuándo, durante cuánto como mínimo y con qué
frecuencia practicarlos para percibir cambios?

Por la mañana en ayunas, es ideal porque ayudas a que tu cuerpo empiece a ser más inteligente en cuanto al uso de la energía y empiece a usar las grasas como fuente (¡que tan bien nos viene!).
Durante la noche el cuerpo hace una depuración natural. Si a ésta le sumás un vaso de agua al levantarte y ejercicios hipopresivos que generan una movilidad intestinal y respiratoria, potenciás toda esa limpieza. Así, luego de practicarlos, vas a sentir una
sensación inmediata de bienestar y que tenés más energía.


Con 1 vez por semana durante 1 hora es suficiente para percibir cambios y, dependiendo de la persona, éstos suelen empezar a apreciarse entre el 1er y el 3er mes de práctica.

5-¿Para quienes son súper recomendables?
Recomendables, para todos (salvo que padezcas lesiones vertebrales, hipertensión,
problemas renales o estés embarazada). Súper recomendables, y hasta diríamos obligatorios, para mujeres que atraviesan el post
parto.
Sí, te dije 5 respuestas, pero va un bonus track. Los hipopresivos pueden ser una actividad en si misma, pero también los podés usar como complemento de deportes, yoga o pilates ya que mejoran su práctica y potencian sus efectos.

¿Qué te parecen? A mí, mucho más que una opción para cumplir con vos. Una contribución a tu salud y un momento de conexión con tu cuerpo. Y si recientemente fuiste mamá, casi un deber.

Por Marie Luppino